martes, 24 de septiembre de 2013

Jorge ROJAS FLORES: Los suplementeros: los niños y la venta de diarios. Chile, 1880-1953, Editorial Ariadna, Santiago, 2010, pp. 7-208.

Jorge Rojas nos presenta en este libro la historia de un sector poco estudiado en la historia, los suplementeros, Mediante una metodología basada en la historia social surge de su intento por reconstruir una historia de los niños trabajadores de la calle y como existía (o no existía) una preocupación por parte de la sociedad con este grupo social. El marco referencial es la principalmente la ciudad de Santiago y Valparaíso, a excepción de algunas provincias) desde 1880 hasta 1953.
Las ideas que trabaja el autor están agrupadas en capítulos, veintisiete para ser exactos, pero agrupados en tres grandes temáticas: el origen y percepción que se tenía de este sujeto de estudio, la cuestión social y los intentos de superación de la pobreza de los suplementeros, finalmente  el sindicalismo en estos. Si bien la obra en si ofrece un amplio espectro de temas, creemos que estos son los más trabajados por el autor.
Dentro del libro se puede rescatar las preocupaciones que tenían la elite, la iglesia u otros organismos por “reglamentar” el trabajo y la vida de los suplementeros, los cuales, a juicio del autor, son de naturaleza huidiza, “mientras la clase alta se esforzaba por civilizar la ciudad, modernizar el transporte, cultivar el refinamiento europeo, los pobres de las calles no abandonaban los oficios que les permitían sobrevivir” (P. 10).

Las ideas principales que hemos detectado son:
Origen y percepción a los niños suplementeros: el autor explica que el origen de los suplementeros surge del interés de las personas por saber el curso de las campañas militares en la guerra del pacifico, el aumento del tiraje de periódicos hizo posible que apareciera en la venta callejera las ultimas noticias sobre el fenómeno, “estas hojas informativas eran voccadas por niños” (p. 13).  Rojas explica que su ámbito de estudio además está relacionado con la historia del periódico en si, pues es hacia 1880 aproximadamente que los periódicos van dejando lentamente sus contenidos ideológicos para centrarse mas en los acontecimientos políticos, sociales y policiales, además del uso de fotografías. Como se señalaba anteriormente, eran los niños y jóvenes los que repartían estos periódicos y se convertían en el nexo entre la editorial y la gente que quería informarse, estos niños eran de un estrato social bajo y gracias las fotografías del autor se puede constatar que vestían sin zapatos y casi de harapos. Este ejemplo aplicado en Santiago y Valparaíso también podía aplicarse a las demás provincias de Chile (según el autor), dentro de este clima social se van gestando en la poblacion chilena un imaginario sobre estos niños, surgen percepciones tanto positivas como negativas.
Dentro de las visiones positivas se recalcaba el fervor patriótico que tenían estos niños pues, a juicio del Periódico de Allende,  estos niños realizaban su labor de una manera honrada y se les hablaba de una manera casi paterna: “el entusiasmo cívico de esos chicos (se refiere a una festividad en que participaron los suplementeros), muchos de los cuales tendrán ocho años de edad. Son los hombres de mañana que no pudiendo servir desde luego, por su pequeñez física [comunican] anticipándose, su aliento a los hombres de hoi” (P. 34-35). Conjuntamente con esta visión tambien surgen otras ideas de ver a este grupo de niños, en general la sociedad creían que estos caían en una degeneración moral, sentían lastima de ellos por su condición social y otras veces sentían una “admiración” por los esfuerzos que demostraban por salir adelante. Dentro de estas visiones se ve a los suplementeros como gente pícara, niños que se dedican a engañar a la gente, robar e incluso gastar su dinero en juegos de azar, estas visiones, que empezó a gestarse en el siglo XX, tenían un punto en común estos niños estaban ciertamente en abandonados por la sociedad, e incluso de las instituciones de caridad. A finales del siglo XIX se empezo a dar algunos esfuerzos tanto por particulares como el estado por regular la presencia de vendedores en las calles y principalmente de educar y moralizar a estos niños que son “victimas” de su tiempo.
La cuestión social y los intentos de superación: el ambiente en el cual vivían estos niños suplementeros no era el más apto para una vida civilizada, el vivir en la calle era concebido como vivir al borde de la ley (o en contra de ella): la prostitución, los robos, estafas, asesinatos y sin contar naturalmente la mala calidad de vida de estos personajes dieron impulso a un interés por parte de las municipalidades y otros por regular y “salvar” a estos niños. Dentro del texto se puede destacar que existieron numerosas leyes municipales para regular el trabajo de los suplementeros, como los  “decretos municipales a la actividad callejera, por motivos presupuestarios (cobro de permisos), higiénicos y estéticos” (P. 63) uno de ellos, por ejemplo, fue sobre que requisitos debían tener las personas para ser suplementeros, pues si estos tenían malos antecedentes no podrían realizar esta obra, o también que para obtener estos periódicos los niños tenian que cumplir ciertas condiciones: saber leer o escribir, asistir a la escuela, tener a lo menos diez años de edad, no manifestar enfermedades repugnantes o contagiosas, etc. pero debido a la falta de coerción, la defensa de las empresas editoriales o simplemente el no cumplimiento por parte de la policía de estas leyes se derogaron.
Si se pudiera resumir la idea principal del autor en esta temática seria algo asi: “Aunque la imagen que la alta sociedad se formo del suplementero tuvo variantes, nunca se abandono del todo el estereotipo de la carencia moral y material. De nada valía, para esta mirada, el esfuerzo diario que hacían para sobrevivir, defender sus derechos y construir un espacio propio en las calles” (P. 80) “el mayor rechazo que se generaba hacia los niños en la calle, y en especial hacia los suplementeros, se debía a la libertad que demostraban en ese espacio y la dificultad de contrarrestarla […] el niño suplementero disponía de dinero por su misma actividad laboral, sin que esta lo atara a un horario estricto…” (P. 81-82).
Aunque las políticas de superación de la pobreza a los suplementeros no tuvo gran éxito, sus ideales perduraron, lograr una educación y moralización a los niños “estaban impregnados de un discurso fuertemente cargado de una visión salvacionista. Luego fueron los propios suplementeros adultos quienes hicieron suyo este ideal” (p. 83)
El sindicalismo y la nueva etapa: anteriormente a 1904 existieron en Chile huelgas de suplementeros, en 1888 existió una por motivos de la desaparición de las noticas policiales (las cuales eran mas motivantes de leer y por ende más vendidas) debido a que provocaba críticas a la moral. Y la huelga de niños suplementeros de 1902 la cual fue por el aumento de precio de los periódicos. Ambas huelgas, según lo investigado, no cuentan con tanta fuente al respecto sobre las causas o las consecuencias que genero dicho movimiento, sin embargo se destaca la idea de que los suplementeros ocupaban un rol dentro de la prensa, ellos están entrecruzados con las editoriales y por ende está asociado a la historia de la prensa y el negocio editorial. Los suplementeros lentamente empezaron a abandonar su marginalidad y alcanzar un grado de dignificación mediante la educación y la regeneración moral y no exclusivamente en aspectos económicos. “desde de los inicios de la actividad, fue muy fuerte el intento por elevar los niveles de dignificación del oficio y consolidar un cierto reconocimiento social” (P. 197) las mutuales, acciones gremiales y sindicatos lograron mediante el cultivo del deporte y mas tarde en adoptar una trayectoral sindical y laboral con las empresas de periódicos, otro aspecto interesante es que este grupo sindical no tenía un grado de politización, aunque si existía un respeto por la autoridad. A juicio del autor fue este sindicalismo el que logro una verdadera dignificación del gremio de suplementeros. “de los niños vendedores de diarios solo quena recuerdos, recuerdos que han sido asociados a las conquistas del gremio, a costa de sacrificios, trabajo y educación (P. 199).

El trabajo historiográfico que realiza Jorge Rojas está basado en una amplia gama de fuentes de las cuales se destaca el periódico, entrevistas orales, literatura, fotografías, páginas web y material audiovisual, eso sin contar con el fuerte sustento de bibliografía especializada, su trabajo está asociado a lo que se conoce como historia social y esta explicado de una manera cronológica donde se puede encontrar sub apartados para cada tema en cuestión. También se destaca manejo de información cualitativa para ciertos casos. La forma de investigar que utiliza es de tipo exploratorio.
 La importancia historiográfica que posee su investigación es mostrar que la modernización  y específicamente el uso del periódico, tuvo su lugar gracias al accionar de estos niños suplementeros que colaboraron repartiendo las noticias. También es destacable que la visión que se da sobre este trabajo es como lo vivieron los niños, pobres y pícaros tuvieron el ingenio de sobrevivir a la adversidad y salir adelante e incluso lograr la dignificación por sus propios meritos y no a costa del estado u otros. Estos suplementeros tienen su lugar en la historia.
 Si bien la obra en sí no es complicada de leer creo que hubiera sido más provechoso agrupar los capítulos de una manera temática y no cronológica, muchas veces el autor mencionaba ciertos elementos pero no los profundizaba y luego los volvía a retomar, logrando más de una ocasión “perder el hilo” a la problemática que está tratando. Sin embargo, se puede destacar muy bien la evolución que tuvieron los suplementeros en la historia. Dentro de las ideas importantes que se señalaron hubiera sido interesante ver que opinaban estos sujetos populares sobre ellos mismos para contrastar con las visiones que tenia la elite y la Iglesia. Aunque esa es una de las debilidades de la Historia de la infancia (se puede caer en subjetividades) creo que es necesario hacer este ejercicio historiográfico, pues el apegarse demasiado a la fuente no permite una mejor alteridad. También es necesario profundizar en ciertos conceptos como el de “pícaro” pues no daba una definición sino que simplemente caracterizaba y al sujeto en sí.
El autor se mostro humilde a la hora de explicar su trabajo, recalcando sus límites metodológicos y no arriesgarse a decir algo por falta de fuentes, se puede decir que fue un trabajo bastante periodístico por la forma de abarcar las fuentes y las entrevistas.
Sin duda lo más novedoso en su investigación es la forma en cómo utiliza las fuentes tanto orales como iconográficas logrando un verdadero complemento del relato histórico. También es necesario destacar que Jorge Rojas en uno de los pocos historiadores chilenos que se dedica a la historia de la Infancia, lo cual da una enorme contribución a la historiografía. Sin embargo, muchas veces llego a ser reiterativo en su trabajo algo que pudo haberse resumido. Dentro de las debilidades de la obra creo que falto problematización, si bien había una amplia gama de fuentes el autor se apegó a las fuentes y no realizar una interpretación crecidamente profunda de algunos elementos. Por ejemplo, el sindicalismo. La obra en sí parece más un relato, al menos teóricamente.

lunes, 23 de septiembre de 2013

Dominique SIMONNET, Jean COURTIN, Paul VEYNE, Jacques LE GOFF, Jacques SOLÉ, Mona OZOUF, Alain CORBIN, Anne-Marie SOHN, Pascal BRUCKNER y Alice FERNEY: La más bella historia del amor, FCE, Buenos Aires, 2010, pp. 274.


      ¿Puede realizarse una historia del amor? ¿El concepto de amor en nuestra actualidad se entendía de igual forma que en el pasado? Dominique Simonnet es la encargada de realizar un estudio mediante entrevistas intentando reconstruir cómo se amaba en el pasado, partiendo desde la prehistoria hasta nuestra actualidad, tomando como referente el continente europeo. En un lenguaje claro y apto para todo público, la redactora entrevista a historiadores y escritores que logran desentrañar una historia de larga duración sobre el amor, fundamentándose en la triada: matrimonio, sentimiento y sexualidad. El tema del amor en el pasado fue algo cotidiano, pero no siempre se cumplió la triada mencionada anteriormente. Las convenciones socioculturales, las condiciones económicas, el marco religioso, las nuevas coerciones hacia la sexualidad, sin duda marcaron en cada época a hombres y mujeres, una forma de vivir la procreación, el placer y el amor de una manera diferente: “matrimonio sin amor ni placer. Matrimonio de amor sin placer. Placer de amor sin matrimonio” (p. 9).
      La hipótesis central de este libro es de carácter explicito el cual es considerar el amor no solo como un asunto hormonal, sino que “siempre está ligado a nuestro pasado lejano [...Los…] comportamientos amorosos arrastran la pesada herencia, no sólo de nuestros padres, sino también de las numerosas generaciones que lo precedieron” (p. 11).  El objetivo general de su investigación también es de carácter explícito y trata fundamentalmente de explorar como se amaba en el pasado Occidental, cuál era el ideal del momento, si este ideal se asemejaba a la realidad y que sitio ocupaba el deseo y el sentimiento en la sociedad. Del mismo modo, la autora nos da a entender que no siempre las imágenes que nos transmite el arte y la literatura de un periodo, reflejan un fiel retrato sobre la sociedad a estudiar.
Para lograr una reconstrucción de larga duración sobre el amor, la autora agrupa las entrevistas de manera cronológica haciendo hincapié en cómo se prioriza un aspecto de la triada matrimonio-placer-sentimiento, partiendo desde la prehistoria hasta nuestra contemporaneidad, su idea de amor es observar cómo interactúan esos elementos de la triada en la historia y que no necesariamente se cumplen a cabalidad

lunes, 9 de septiembre de 2013

EDUARDO CAVIERES: La Historia en controversia. Reflexiones, análisis, propuestas. Valparaiso, 2009.

“dialogo en torno a la historia y a los historiadores”

 Ideas principales:
a)      Sobre historiografía: el dialogo comienza sobre cómo se ha manifestado el interés en algunas corrientes historiográficas, donde se comienza hablando sobre la demografía histórica, la cual, fue un esfuerzo por los historiadores por buscar formas de historiografía más exacta, las precisa y mas demostrada, sin embargo se demostró que existía una frontera entre lo histórico y lo no histórico, debido fundamentalmente a el ámbito de lo biológico, pues no siempre las familias nucleares  producen niños, también tienen fases de no nuclearidad, sin contar naturalmente con aquellas relaciones familiares donde no se vive en el mismo techo. Posteriormente buscando el historiador mayores alcances de interpretación se hablo de la historia de la familia, en términos de organización social, de estructuras sociales, etc. Pero de igual modo esos conceptos trabajados  no declaraban las causas que permitían explicar las diferencias entre un fenómeno y otro.  Cuando se hablo de la historia de las mentalidades, la cual aparecen arraigos sicológicos de los individuos y las estructuras fuertes de pensamiento, a juicio de Levi, no existe una sociedad con una mentalidad, existen límites de lo pensable, es decir existen mentalidades múltiples e infinitas posibilidades, esto se debe a que los hombres son diferentes los unos de los otros (necesidades, deseos, informaciones, etc).
 La conclusión a la que llega Levi, no es señalar que los modelos anteriormente mencionados son fracasos que llevaron como consecuencia a la historia social de la cultura, sino  de cómo el historiador ha tratado de hacer de la historia una ciencia lo mas total posible. Cavieres plantea que el fruto de esta “evolución” de la historiografía correspondería a un fundamento para explicar la sociedad pre-industrial, aunque Levi señala que la sociedad antes de la revolución industrial no era más simple, sino que tenía otras complicaciones.   
b)      El historiador: la labor del historiador es otra de las ideas importantes del  libro que se destacan, entre ellas está el trabajo con otras ciencias sociales, pero que sin embargo, no  tienen muchas veces la misma cantidad de datos pertinentes, por ende el historiador debe describir situaciones emanadas de parcialidades de información.
Dentro de los defectos de la relación entre historia y ciencias sociales es que (a juicio del historiador) el mundo verdadero comienza en la mitad del siglo XVIII, es por esto que existe un abandono de la historia moderna, pues no se considera interesante. Lo importante en esto es que, a juico de Levi, el tiempo de la historia no es el tiempo del contemporáneo en contra de los modernos: es simplemente el tiempo de los problemas, la historia se hace por problemas. A reflexión de Levi, hoy se debe partir de que los documentos poseen su rasgo tanto de objetividad como de subjetividad, es a partir de esto que el historiador debe ordenar estos elementos para darle coherencia y explicar el desorden, pues a su juicio el mundo es desordenado y como es desordenado debe ser complicado analizarse.
c)       Los documentos: Givanni Levi parte de la idea de que los documentos son escritos por la gente exitosa, he ahí donde comienza su reflexión, la historia la escriben los vencedores y estos vencedores (elite) no escriben sobre sus fracasos o sobre los fracasados, en esta lógica, Levi plantea que los documentos son parciales, pues describen especialmente cuestiones que son producto de una diferenciación social, este es el problema pues el historiador cree que todos los documentos son toda la realidad, cuando no es así, esa es la razón de porque la historia cuantitativa es criticable. (entendemos por documentos el escrito, el inmaterial como la tradición oral o el material como la iconografía). Además de lo anterior los documentos pueden ser distorsionadores, pues a partir de un simple dato se puede llegar a conclusiones generales que no precisamente reflejan el fenómeno, por ejemplo la descristianización con los datos de Vovelle.
d)      La metodología: La reflexión comienza cuando se trata se establecer los límites en la historiografía, esto ha ocurrido por la aplicación de nuevas perspectivas de análisis y la amplia variedad de fuentes, entre estas nuevas formas metodológicas se destaca la microhistoria, la cual “es historia de grandes problemas vistos a través de un particular, un lugar, una situación, un documento, un cuadro. A través de este se sale para llegar a problemas generales, no soluciones, generales”. En la microhistoria existe una multiplicidad de tiempos, por lo cual comparte mentalidades, comportamientos, situaciones de naturaleza antropológica, que van explicando (o aproximarse a explicaciones) sobre las conductas profundas y sobre los comportamientos y las actitudes de individuos y de grupos dentro de una sociedad. En este sentido, las nuevas formas de hacer historia ha resaltado estudiar a las personas, sean incultas, desgraciadas, etc. Pues produce conocimiento, pero además emociones. Desde la microhistoria  se puede, de este modo, hacer una conjunción, la interrelación entre esos tipos de personas y como sus vidas se van comunicando.
a modo de conclusión, Levi plantea que dentro de los métodos de la historia no se debe caer en el relativismo, pues el historiador trabaja sobre la idea de que las cosas no son cognoscibles en su conjunto, son irreproducibles en si totalidad: sin embargo son reales y cognoscibles en su parcialidad, y en sus transformaciones, porque los puntos de vista del tiempo cambian.
Comentarios:
                Al finalizar la lectura sobre este documento, siento que ha quedado algunos espacios sin respuesta, vacios dentro de la metodología de la historia que no se tratan, en primer lugar el rol del historiador, si bien se hacen algunas menciones pero no se trata la verdadera esencia “la historia es inseparable del historiador” (como diría Marrou) recordemos que la historia es una construcción no solo del pasado sino asimismo del presente. También es necesario recalcar otro aspecto importante y es como se ve la historia hoy en día, pues deja un sabor amargo la reflexión de Giovanni Levi sobre el corporativismo de la historia y la gremialización de la historiografía, este punto si bien estoy de acuerdo, es necesario resaltar que hoy en día el enfoque histórico sigue cambiando y ya hablamos de una historia ambiental o historia del tiempo presente algo que en esa obra no señala.
                El formato en el cual está comunicado este escrito, si bien favorece a una lectura rápida y comprensiva deja cuestionamientos sin principio ni final, uno de los autores habla de la historia de las ideas y que criticaba el método por no aceptar el contexto, pero no explica ni que es la historia de las ideas o mayores detalles sobre su método, lo mismo ocurre la lectura sobre las tendencias historiográficas mencionadas como las mentalidades y la historia socio cultural, solo se hace hincapié en sus puntos de similitud, pero no profundiza, salvo eso si en la microhistoria y la historia local pues tratan de diferenciarlas.  Otro aspecto es también el formato dialogo, pues las ideas se cortan y no siguen una línea clara, la divagación sobre un tema entorpece buscar las ideas principales o incluso lleva que no deje la idea terminada, sin embargo, la intervención de Cavieres para profundizar algunos aspectos ayuda a comprender mejor el texto y la idea de estos.



“de la microhistoria a las construcciones sociales de la historia”
Ideas principales:
a) Sobre la microhistoria: esta es definida como “una reducción de una escala de representación que permite ver cuántas cosas importantes escapan al ojo del observador, cosas grandes o pequeñas, pero sin ser un operador de microscopio”. Esto se debe a que la labor del historiador es subrayar las diferencias y subrayar las complejidades  y no sólo las pequeñas uniformidades. Esta problemática surge de la búsqueda de la comprensión de los comportamientos de los hombres, los cuales todos son diferentes.
b) La historia como disciplinamiento: Levi explica que la historia es un esfuerzo de disciplinamiento que mal entendido produce desastres, como el ejemplo de Wallestein de afirmar que la historia es un discurso de disciplina, pues estos dejan entrever que el ser humano no puede hacer nada contra el poder mundial, solo es un elemento del sistema. En este sentido, la idea que rescata el autor es plantear que el papel del historiador es observar y estudiar las reglas sociales que han hecho que los comportamientos sean diferentes.
c) Sobre la objetividad-subjetividad: una idea interesante a rescatar de este artículo es la visión que tiene el autor sobre la subjetividad y la objetividad que a su juicio deben convivir juntas, pues son parte de la realidad, siguiendo esta lógica, el historiador al escribir la historia debe tener presente que la realidad a la cual tiene acceso es fragmentada y no puede hacer afirmaciones generales (salvo en una especie de retorica) y segundo es que su escrito va dirigido a un público, el cual va cambiando con el tiempo, es por esto que se debe releer la historia, para comprender de mejor manera su sentido, esto no es caer en el relativismo, ni subjetivismo, ni objetivismo, a Juicio de Levi eso es vital tener presente, pues la historia es una parte del objetivismo con puntos de vista subjetivos de una parte de la realidad, la cual se transforma porque los seres humanos son diferentes en el tiempo y entre ellos.
Hipótesis:
El autor plantea que las ciencias sociales trabajan sobre un tema único, el cual es “comprender que la comprensión de los hombres es algo que se puede hacer sólo si nosotros (el historiador) no dividimos al hombre” y es por esto mismo que, para Levi, no hay que inventar límites entre la historia y las ciencias sociales.
Comentarios:
El autor de este artículo afirma que la microhistoria es una de las formas más completas de hacer historia debido a su rol de problematizar a una escala pequeña un fenómeno histórico, de esta manera puede no pasar por alto ciertos elementos que en la historia tradicional dejaría a un lado o simplemente no considera pertinente abordar, esto no es solo un paso importante para alcanzar la historia total, sino también de hacer una ciencia más humana, o como señalaba Levi, de abordar también emociones frente a un suceso histórico, creo que este punto es uno de los más interesantes de su obra pues no niega la subjetividad en su trabajo histórico, sino que la incorpora con ciertos matices.

miércoles, 28 de agosto de 2013

Como se ha entendido el cristianismo de la Edad Media

Hace tiempo no publicaba algo, me he hecho el tiempo y decidi hacer algo mas contundente... espero lo aprecien. saludos


El presente ensayo pretende darnos algunos lineamientos  sobre los prejuicios que tenemos al abordar la Edad Media, principalmente como entendemos al cristianismo, ¿es una religión o un modo de vida? Debido a lo profundo del tema hemos decidido enfocarlo a unos puntos escenciales. ¿Fue la Ilustración la que nos entregó una definición de cristianismo? ¿cuál es esa definición? Y sobre todo ¿fue esta definición la que “moldeo” nuestra visión de la Edad Media?
Generalmente tendemos a mirar este periodo histórico como una época en que la religión dominaba todas las estructuras de la sociedad, el cristianismo era LA visión del mundo en la Edad Media, o al menos es eso lo que nos presenta las fuentes. No obstante,  bien sabemos que las fuentes son escritas en determinados contextos. Primero que todo, debemos señalar que quienes manejaban el conocimiento del latín en aquella época no eran la mayoría de la población, sino  que una mínima parte de ella y sobre todo quienes escribían eran los monjes, por ende estos monjes son nuestra más amplia visión de lo que ellos pudieron haber visto de la Edad Media, estos religiosos evidentemente escribían para su público y no necesariamente para toda una comunidad, por ejemplo les resultaría más novedoso e interesante como los laicos ejercían su espiritualidad, los asuntos que no les interesaban simplemente los borraban o modificaban.
Así mismo, cuando nos acercamos en un primer momento al contexto creemos que las personas de este periodo viven en una especia de dualismo de vida espiritual-vida terrenal. Esto se debe que la Iglesia, una vez que el Imperio Romano se desarticula, empieza a convertirse en una institución para otorgarle al cristianismo mayor universalidad, además empieza por regular los territorios y los reinos germánicos en Europa. Pero fuera de estos argumentos históricos se debe entender la base del cristianismo como tal, la deidad es rey en cielo y tierra por ende para el cristiano la concepción del mundo no es dual sino una sola, pues Dios es omnipotente, él es el principio de todo y el fin de todo.
Primero que todo tenemos que tener presente que entendemos por espiritualidad, la cual está ligada a una dimensión religiosa de la vida interior y sobre la relación de Dios mediante la ascesis. Este término es contemporáneo y no constituye necesariamente lo que en la  Edad Media ocurría pues los sujetos medievales no distinguían entre religión y modo de actuar, para ellos la espiritualidad era una relación entre las prácticas de la religión y las prácticas de la vida familiar cristiana y no existía diferencia como la entendemos nosotros. La modernidad no ha enseñado, mediante la razón, que la religiosidad está íntimamente ligada  a la Institucionalidad, esta situación no las heredo la Ilustración y por ende fue este siglo filosófico el que nos dio nuestros primeros prejuicios al cristianismo. No obstante, esto no siempre fue así, asociamos la religión y la razón como rivales. Sin embargo, la Ilustración partió en un primer momento como una naturaleza religiosa. Esto no es nuevo, ya que se entiende que el siglo de las luces utilizo ciertas normas que tenían como base la religión cristiana y que, más su visión del cristianismo está limitada a la crítica de su Institución en los siglos anteriores al XVIII. Por ejemplo: la intolerancia religiosa, el ataque a la superstición y los excesos, etc.
En realidad, la Ilustración y la ciencia del siglo XVII atacaban la palabra revelada, por ejemplo la Biblia, pues al leerse había muchas contradicciones históricas y, sobre todo, se cuestionaba la creencia cristiana como la única religión verdadera para la virtud, no era extraño que estos filósofos leyeran las crónicas de los viajes de descubrimientos y vieran como indígenas de América, hindúes o chinos poseían tanta moral en su vida cotidiana que un europeo, se hallaba presente una misma moral y una idea de Dios clara.
Por otra parte, en la misma época no se divide la religión de la ciencia, sino que se complementan. Vemos como ejemplo de ello la misma teoría racionalista de Descartes, la cual parte como principio de que Dios existe:
 “Es la existencia de Dios lo que nos permite entonces construir el puente entre nuestra mente, nuestra ´cosa pensante´, y todo el mundo físico, inclusive nuestro propio cuerpo. Dios no nos engaña. Dios es la garantía que nos impide dudar de nuestra propia existencia, no ya como seres pensantes, sino también como seres materiales. […] Dios es la razón por la que no podemos dudar de la existencia del mundo” (González, 1994, 280).
De lo anterior podemos preguntarnos ¿Por qué está crítica? ¿Qué quieren lograr? Estudiosos como Juan Arayano explica: “hay que advertir que la religión natural no fue un invento de filósofos anticristianos para combatir las religiones históricas, sino en primer lugar un procedimiento utilizado por gente piadosa […] para superar sus disensiones teológicas y en segundo lugar un instrumento forjado por científicos devotos para apoyar sus credos” (Montecinos y Toledo: 2007, 248). Como se puede observar, la razón ilustrada y la religión en un primer momento no eran enemigas, sino que, en realidad ambas se complementaban a alcanzar un mismo propósito: guiar al ser humano a una verdadera forma de vida. Esto quiere decir, no caer en los vicios que en épocas pasadas había. Encima de esto, “la Ilustración  deseaba transformar el cristianismo, ilustrarlo, pero sin renunciar a sus valores morales” (Valjavec, 1964, 104), ¿Cuál es esta moral que escogen? Es una moral social, es decir, que ayude al bienestar y al progreso humano. En términos simples, esta moral social se expresa en tres virtudes: la tolerancia, la beneficencia y la humanidad.
La Ilustración entra en contacto con la religión, pues se reconoce a esta última como una gran tarea educadora. Por ende, la Iglesia y en realidad las creencias cristianas deben fomentar una educación racional. De este modo, la Ilustración afirma que “la escuela y la  iglesia son las instituciones que deben cumplir una misión que no es capaz de llevar a cabo la filosofía: la misión de ilustrar al pueblo y estimularlo a la virtud” (Valjavec, 1964, 102)
Descubrir  el lazo de religión y fe es más complejo de lo que parece, pues si bien externamente la Iglesia censuraba o rechazaba las obras filosóficas, internamente el clero (regular y secular) las aceptaba, las leía o incluso estos mismos eran filósofos.
La ideas teológicas como las de Voltaire rechazaban la convicción de la fe por revelación y por ende los dogmas de la Iglesia. No obstante, valora las convicciones morales de la religión cristiana. Voltaire sigue las líneas del deísmo, y ataca los argumentos de los ateos. Sin embargo, para él su verdadero enemigo es la superstición o fanatismo religioso:
“El ateo es un monstruo que solamente devorará para saciar su hambre; el supersticioso es otro monstruo que desgarrara a los hombres por deber. […]; el ateo robará un cáliz de oro de una iglesia para dar una cena a unas mujerzuelas, pero el fanático celebrará un auto de fe en esta iglesia y cantará a grito pelado un cántico judío mientras quema a unos judíos”
Ha quedado un poco más claro que la religión y la razón no siempre fueron enemigas, pero ¿Qué relación tiene esto con el cristianismo de la Edad Media? Y la respuesta tentativa que podemos inferir es que la Ilustración al racionalizar la fe y volverlo comprensivo hizo que la mística se perdiera y el lazo de relación entre Dios y los hombres  como una comunión desapareciera (no es extraño, en este sentido, que en este mismo periodo surgiera una de las líneas más rigoristas  de la religión cristiana, el Jansenismo, cuya doctrina volvía a plantear la idea de incomprensividad de Dios y la comunión humilde con él). Por ende cuando analizamos la Edad Media nuestra visión del cristianismo la asociamos a simplemente un conjunto de prácticas y no como una cultura de la época. Al leer las fuentes escritas por teólogos volvemos a una idea secular de espiritualidad y nos estrechamos de mente para comprender el proceso como un todo.

Bibliografía
Gonzalez Justo (1994): Historia del cristianismo desde la reforma hasta la era inconclusa, Caribe, Nashville.
Montecinos, J y Toledo, S(2007): Ciencia y religión en la Edad Moderna, Fundación Canaria Orotava de historia de la ciencia, Santa Cruz de la Palma.
Valjavec, Fritz (1964): Historia de la Ilustración en Occidente, Rialp S.A. Madrid.
Voltaire (1972): obras. Volumen II. Vergara, Barcelona.

domingo, 25 de agosto de 2013

José Carlos Bermejo Barrera: “¿Qué es la historia teórica”. Historia antigua ¿para que? Vigor y decadencia de la tradición clásica, Editorial Akal, Madrid, 2004. pp. 156-181.

El autor es Catedrático de Historia Antigua en la Universidad de Santiago de Compostela y sus trabajos de investigación están relacionados con teoría de la historia y religiones antiguas.
José Carlos Bermejo comienza el capitulo señalando sobre la utilidad de la historia antigua y como se ha trabajado. Primero que todo explica como se formo el proceso de idealización del mundo clasico partiendo de la misma antigüedad para diferenciarse de otras culturas mediante una cultura letrada  y la construcción de modelos políticos que tenían validez supratemporal. Realizando una historia de la historiografía el autor analiza como se han estudiado el mundo clásico distintos autores del siglo XIX destacando que la sociedad de su tiempo son un modelo imitativo del esplendor greco-romano, no solo desde el punto de vista político sino también cultural. No obstante, a finales del siglo XIX empieza lentamente a cuestionarse esa legitimidad del modelo clásico pues se estudiaba como si el estado romano fuera el mismo que el de nuestra contemporaneidad. Autores como Marx, Nietzche y Freud  quitaron el elemento paradigmático de la historia clásica, si bien ellos no trabajan el mundo grecoromano poseían conocimientos de su cultura y objetaron los puntos de vista de la libertad, la economía, la sexualidad y la racionalidad. El autor finaliza el apartado señalando que los estudios clásicos se investigaban por buscar un asunto identitario en estas sociedades y de superioridad  cultural frente a otras civilizaciones, pero que en el siglo XX producto de la segunda guerra mundial, el proceso de descolonización y las relaciones oriente-occidente esta visión ha perdido su lugar predominante. El capitulo finaliza sobre la importancia de estudiar la historia de la historiografía. Según el autor, para estudiar esto es necesario analizar las circunstancias biográficas y sus ideas políticas pues estas configuran el pensamiento del historiador. No obstante, el autor hace un rescate de Nietzche para catalogar a los historiadores, estos serian: el historiador anticuario (aquellos que analizan la historia de manera científica, aferrados a los datos y siguen el ejemplo hegeliano de que todo lo racional es real y viceversa), el historiador monumental (el conocedor de la historia y que trata de aplicarla al mundo, son ideólogos) y el historiador critico (aquel historiador que aplica la historia para su propio vivir).

jueves, 22 de agosto de 2013

Teodoro Momsen: “nacionalidad, Religión, cultura”. EL mundo de los cesares, FCE, México, 1945. pp. 570-592.

El historiador Mommsen nos presenta en este capítulo la historia política de la nacionalidad y la religión en la Republica romana desde Anibal hasta la guerra civil, principalmente la lucha de las costumbres entre el latín y el helenismo, armonía o conflicto es lo que se pregunta el historiador al consultar las fuentes. Mediante una metodología basada en el apego de las fuentes escritas reconstruye  como se concebía la nacionalidad expresada en la lengua y los hábitos de los romanos al tener contacto con la cultura griega.
Las ideas que trabaja el autor están agrupadas en subcapítulos pero asociado a latinismo-helenismo, filosofía, religión y enseñanza.
En la primera parte explica como las conquistas romanas otorgaron al territorio más de una sola nacionalidad pues los romanos respetaron las antiguas costumbres y producto de la inmigración la lengua romana no solo se circunscribió a la frontera itálica sino también a las provincias. No obstante el autor explica que “la total latinización de Italia va acompañada de la reciente helenización de la península” (P. 571) esto se debe a que los altos estratos de la sociedad itálica tienen cierta fascinación por el arte y la literatura griega, logrando con el tiempo darle mayor primacía y derecho. El cómo llego la helenización al territorio fue producto de la inmigración comercial de elementos orientales y griegos hacia las capas del proletariado itálico de los puertas más importantes para allí difundirse por toda la península. El autor hace una diferencia entre la helenización en las capas altas y bajas, mientras las altas desarrollaban  un cierto cosmopolitismo, mientras en las más bajas se caía en los excesos de la cultura y la barbarie. Sin embargo, hubo de pasar poco tiempo para que en la alta sociedad ocurriera lo mismo.
 En cuanto a la influencia del helenismo en la religión y la filosofía. La religión romana estaba enlazada al estado y la familia romana. No obstante, en el periodo se hizo una transformación  al otorgarle la incredulidad de la filosofía, la superstición y sectarismo de las religiones oriental. La filosofía griega que influyo en Italia son el epicureísmo, el estoicismo y escepticismo. Las cuales dieron a entender la religión no como fe sino como reflexión, no obstante en un primer momento la filosofía fue tratada hostilmente por los romanos por su tratamiento especulativo, no obstante será tolerado pero con matices más sensualistas que filosóficos en sí.
Dentro del territorio itálico de la Roma republicana  se mantuvieron variados cultos extranjeros y practicados con mucha vitalidad debido a su carácter exótico como en el aspecto comercial sin embargo el autor es categórico al señalar que todo eso provoco en los romanos unas crisis  de conciencia la cual se agudizaba con antiguos sentimientos provocados por la guerra civil
El capítulo finaliza con un apartado sobre la poca enseñanza que se daba a la juventud romana anteriormente, curiosamente en las provincias la educación a los hijos era un asunto público y privado basado en la igualdad civil. La cultura griega vino a suplir esta carencia y se empezó ha preocuparse de la educación física mediante la caza, el desarrollo de la lengua enlazada con el griego y conocimientos por la literatura griega y mitología, asi mismo también el estudio de la retórica y la filosofía. Los educadores eran principalmente profesores griegos que prestaban sus servicios, o los esclavos.

lunes, 19 de agosto de 2013

Jacob Buckhardt: “El desarrollo del individuo”. La Cultura del renacimiento en Italia, Ed. Losada, México, 1962. pp. 141-171.

Burckhardt, historiador Suizo, realiza su estudio sobre el arte y la cultura en la Italia entre los siglos XIV y XV, creando el termino para este periodo histórico como renacimiento. Desde un punto de vista basado en la religión, el estado y la cultura, el autor explora como nace en el periodo el concepto de individualidad. “Se despierta una forma nueva y objetiva de observar y tratar el estado y en general las cosas de este mundo, y a su lado, y con el mismo ímpetu, se levanta también lo subjetivo; de modo que el hombre se convierte en individuo provisto de un espíritu y se reconoce a sí mismo como tal” (p. 141). En una primera parte del texto se puede observar como en el naciente estado moderno los gobernantes explotaban y perfeccionaban su personalidad mediante la intelectualidad, actitudes polifacéticas, para llamar la atención, esto se expresaba mayormente en el arte. No obstante, el autor explica “es difícil resolver si éstos tenían como objetivo consciente y expreso el armonioso perfeccionamiento de su existencia material y espiritual” (p. 145), lo cual demuestra las limitaciones que tuvo en su tiempo Burckhardt al trabajar en este enfoque cultural. También en esta primera parte el autor enfatiza porque en este periodo se desarrolló la individualidad y no en la época pasada y la razón se explica en la “libertad” que tienen estas ciudades estado al tener riqueza por los contactos comerciales, una Iglesia que no esta unida al estado, las libertades municipales y el ocio (ausencia de partidos políticos, eso sin contar la cultura de la época. “En la impotencia política general donde con más variedad y vigor prosperan las diferentes tendencias y aspiraciones de la vida privada” (P. 143). En una segunda parte el autor profundiza este punto de como el individuo se concentra en el poder y a disfrutarlo gracias a que en la república italiana se cambiaba de partido muy seguido, esto causaría el ran auge de caudillos personales. Finalizando el capítulo,  Burckhardt explica que características tiene este desarrollo individual, este está asociado a un carácter polifacético, el conocimiento de las lenguas clásicas y su cultura, en aprender variados conocimientos (el concepto de hombre universal) y sobre todo el reconocimiento exterior la fama.
El autor se plantea preguntas de forma constante y encuentra respuesta en la obras de arte más que en los documentos y da bastantes comparaciones de los tiempos pasados con su objeto de estudio.

viernes, 16 de agosto de 2013

Ludwig Friedlaender: “La Filosofia como escuela Moral”. La Sociedad Romana, FCE, México, 1984. pp. 1124-1182.

RESUMEN
       Ludwig Friedlaender  se encarga de estudiar el rol de la filosofía en la sociedad romana. Desde un punto de vista historiográfico cultural, el autor explora como era vista la especulación metafísica o filosófica en los círculos de la sociedad romana, si bien no especifica el ámbito espacio-temporal, a través de sus ejemplos se puede deducir que corresponde desde la Republica romana (la llegada de la moda helénica a Roma) hasta el gobierno de Marco Aurelio (Dinastia de los Antoninos del Imperio Romano), el texto comienza hablando de cómo surge la filosofía en la Grecia Antigua como respuesta a el escepticismo o desprecio de los dioses, los cuales cometían crímenes en sus mitos, la filosofía nació para despejar esas dudas del actuar de los dioses y atribuirles sus fechorías a semidioses diabólicos o incluso que estos poseen un carácter público y privado, siendo los primeros los pilares de la moral y con los cuales se relacionan con los hombres. Friedlaender argumenta que la religiosidad en el mundo clásico no se debe entender como la nuestra,  pues los antiguos no creían en la revelación de una voluntad superior. “los paganos no habían recibido la ley del exterior; se daban […] la ley a sí mismos y se atenían no sólo al reconocimiento propio de sus deberes, sino también a sus propias fuerzas para cumplirlos” (p. 1127). El apartado termina llegando a la conclusión de que el filósofo solo debía buscar la verdad, pues la ignorancia era la fuente del vicio, en cambio el saber era la raíz de la conducta moral.

                 Otra idea fundamental es como se concebía la moral según la filosofía, si bien existían diversas escuelas todas llegaban a un mismo fin “Soportar o renunciar […]. La meta de todo conocimiento […], es el desprecio de la vida”. En el sentido anterior el autor explica como los cristianos de los primeros siglos adoptaron la ética pagana filosófica y la combinaron con el pensar de Cristo. No obstante, en la Roma Republicana y primeros tiempos de la Roma Imperial, la filosofía no era bien vista, este el aspecto central del texto pues sus doctrinas eran incompatibles con la praxis romana, aun sabiendo que la especulación era un ejercicio saludable “moderador de las pasiones” (p. 1131).

                  El filósofo en la Roma antigua  no era visto con buenos ojos, explica el autor, ni por el gobierno romano (por sus críticas al sistema y al emperador), ni por las masas (por sus exigencias sociales y sobre todo lo pretensiosos que eran estos pensadores), e incluso la gente culta acusa de ser “actividad inútil y superflua” (p. 1138). El tema de discusión se explicaba en si la virtud se podía enseñar pues los grandes hombres no tuvieron necesidad de aprender filosofía y quedaba demostrado que donde se enseñaba este tipo de conocimiento (Grecia) se convirtió en “cuna de tiranos y enemigos de la patria (p. 1139). No obstante, a nivel particular las opiniones diferían Emperadores y hombres de estado habían fomentado e incluso habían abrazado la filosofía como una escuela de formación moral, incluso en un mundo donde la igualdad no existía, los esclavos que eran filósofos gozaban de cierto respeto. El autor finaliza su escrito con una importante conclusión: la filosofía fue un vehículo accesible a todos para el conocimiento, que echaba abajo las barreras sociales y  debilitaba el exclusivismo de la conciencia nacional.

lunes, 12 de agosto de 2013

Arnaldo Momigliano: “Ensayo de historiografía antigua y moderna”. ¿Mentía Fabio Píctor?, Editorial FCE, México, 1975. pp. 89-94.

Arnaldo Momigliano fue profesor de la universidad de Turín en 1936, pero debido a las leyes raciales de Mussolini es exiliado. Es considerado uno de los más grandes intelectuales del siglo XX, no solo estudio historia antigua, sino también sobre los métodos de la historia moderna, además de esto sus trabajos e investigaciones han contribuido a un mayor estudio sobre historia y eurocentrismo.
El autor comienza en el capítulo “¿mentía Fabio Pictor? Haciéndose preguntas sobre porque es necesario rescatar el pasado y además de cómo llegamos a él, después de esa introducción destaca los pocos datos que existen sobre el nacimiento de Roma y hace un análisis historiográfico sobre cómo se ha criticado a la literatura como fuente histórica y como la arqueología trata de confirmar el origen de roma literario con el histórico debido a la desconfianza de las primeras fuentes. De este modo, llega a el primer historiador romano que escribe los orígenes de Roma Fabio Píctor, un patricio que escribe durante la segunda guerra púnica, curiosamente lo hace en griego, si bien su obra se perdió, el autor destaca y corrobora que la obra de Píctor fue citada e influyó mucho en los escritores posteriores sobre la imagen de Roma para su posterioridad,  no obstante los eruditos han destacado que Píctor si bien trataba de divulgar a los no-romanos su historia esta caía en cierta propaganda y por ende en una falsificación de la reconstrucción histórica. Entre estos estudiosos se encuentra Alföldi, quien señalaba que los historiadores contemporáneos no percibíamos estas falsificaciones o reconstrucciones arbitrarias.
El citado Alföldi, señalaba que Píctor hizo desaparecer la antigua forma de estudiar la tradición histórica romana, no obstante no se detiene al tratar de explicarla o trabajarla. Este historiador trato de manera propia reconstruir el pasado de Roma, pero a pesar del trabajo de algunas inscripciones, monumentos, etc solo queda estipulado que esta ciudad paso de la dominación etrusca de un gobernador a otro y que Roma fue miembro de la liga latina (ayuda a los vecinos como federación) pero que para ese tiempo IV y III aC. Roma aun no sobresalía de las demás ciudades.
Momigliano destaca de este estudio dos cosas importantes, la primera es que la historia temprana de Roma es irrecuperable y debemos recurrir a la fuente sea esta fidedigna o no. Gracias a los aportes de la Arqueología y la epigrafía se sabe que Fabio Píctor si conocía los hechos del pasado romano.

jueves, 8 de agosto de 2013

Santo MAZZARINO: “El Fin del mundo antiguo”. Los juicios de Dios como categoría histórica, Editorial UTEHA, México, 1961. pp. 51-73.

Santo Mazzarino fue historiador italiano dedicado a la historia antigua, especialmente la antigüedad tardía. Su obra está enfocada en una historia de las ideas sobre la decadencia de Roma y su desaparición a través de un análisis historiográfico que parte desde el siglo III hasta nuestra contemporaneidad. El ejercicio crítico que practica el autor consiste en observar las distintas interpretaciones historiográficas enlazándolas con la historia general de la caída de Roma, logrando de este modo un ensayo monográfico en cada capítulo que trata. Además de lo anterior, su crítica a la caída de Roma es cuestionarse el concepto de “fin” ¿realmente termino Roma?
                El capítulo analizado: “los juicios de Dios como categoría histórica” nos muestra como los antiguos cristianos enlazaron la historia sagrada de pueblo de Dios con la historia profana de la decadencia romana a través de las invasiones bárbaros. Los cristianos consideraban que esta situación era un juicio de Dios como castigo a los romanos que en un tiempo pasado atacaron y persiguieron a los cristianos. El historiador hace un gran acercamiento a ver como las ideas intelectuales de San Agustín “la ciudad de Dios” se manifiestan en la obra de Orosio y por ende la mezcla entre lo histórico y lo sagrado “el pensamiento de Orosio conduce a la conclusión de que la historia es toda divina, de que todo evento habla directamente a Dios” (p. 55).

                “Los Juicios de Dios” o interpretaciones de San Agustin, Orosio, Rutilio, Zozimo, etc.  Destacan dos puntos  importantes que hacen diferir  a cristianos de paganos y es por una parte que los paganos tienen cierta nostalgia por su pasado (y culpan a Constantino de sus desgracias), pero por otro destacan que muchos hombres de la civilización romana preferían vivir en la barbarie.  También es necesario destacar que estos juicios fueron vistos como miradas escatológicas del fin del mundo pero no por ello fueron históricas, los cristianos le dieron el valor histórico al fenómeno. Y finalmente, se destaca las actitudes de los cristiano- romanos hacia los barbaros que en un primer momento es rechazo pero posteriormente al 476 dc. La idea de decadencia se ve modificada por la colaboración de barbaros y romanos para la defensa de la civilización cristiana.

martes, 6 de agosto de 2013

Mikhail ROSTOVTZEFF: “Historia social y económica del Imperio Romano”. Augusto y la política de restauración y reconstrucción, Editorial Espasa-Calpe, Madrid, 1962. pp. 94-161.

El autor es recordado por ser uno de los primeros historiadores que examinan la economía en la antigüedad en términos de capitalismo y revoluciones. Además de lo anterior tiene el mérito de haber supervisado personalmente  las actividades arqueológicas de la Universidad de Yale.
RESUMEN
Mikhail Rostovtzeff investiga en este apartado las reformas que llevo a cabo Octavio Augusto para restaurar el orden romano y como reaccionaron las clases sociales con estas políticas. El autor comienza señalando que posteriormente de las guerras civiles los ciudadanos romanos querían restablecer la paz y que no se volviera a repetir estos conflictos, además de esto aparece en escena el ejército como representantes de estos ciudadanos (y estaba compuesto por ellos) que colaboran en esta paz asociándose al emperador y no al senado. El ejército no solo cumplia esta labor además era el encargado de mantener la paz tanto dentro como fuera del imperio, Augusto se da cuenta de esta situación y toma medidas para que el ejército sea más inofensivo desde el punto de vista político.
A lo largo del texto el autor nos da a entender que es uno de los pioneros en el área económica social pues a lo largo de su obra no abandona la línea política, pero entrecruza los elementos económico-sociales. Los cuales están expresados en el ejército y quienes componen esta legión (clase senatorial y équites). Rostovtzeff explica cómo los ciudadanos équites ven la entrada al ejército como una forma de ascenso  social  ya que son reclutados de manera voluntario y con muy buen sueldo. El hecho que el ejército romano fuera tranquilo, gracias a esas medidas, favorecieron la política de reconstrucción de Augusto y en cierta manera la tranquilidad de la legión representaba la tranquilidad y confianza del pueblo romano al emperador.
En el plano social Augusto no altero las clases sociales, sino más bien las demarco más claramente y como podían participar en la vida del estado romano, la separación que realizo se basaba en las costumbres que tenían los romanos ya desde la república.En el plano económico el autor explica el rol de las arcas fiscales y privadas del emperador para mantener la paz romana, donde señala que no existía esta distinción pues el emperador muchas veces tuvo que utilizar sus propios recursos para fines públicos, lamentablemente a la larga los próximos emperadores no practicaran esto, sino al revés. Además de esto, es necesario señalar que el estado romano no tomo medidas restrictivas contra el comercio (salvo políticas o morales, pero jamás llevadas a la práctica) lo cual el autor sería una política de laissez faire.
Metodológicamente hablando, Rostovtzeff hce bastante uso de las ciencias auxiliares y en sus notas a pie de páginas son extensas y bastante explicativas. Las imágenes que utiliza si bien no van acorde al relato, nos sirven como ventanas al pasado pues nos ilustra y explica  los frisos, copas, etc  sobre la vida durante el periodo de Augusto.

domingo, 4 de agosto de 2013

Moses FINLEY: “La Grecia Antigua: economía y sociedad”. La Ciudad Antigua: de Fustel de Coulanges a Max Weber y más allá, Editorial Crítica, Barcelona, 1984. pp. 35-59.

Moses Finley fue uno de los grandes historiadores de la Antigüedad, se destacó por hacer una historia social de la antigüedad donde aplicaba tanto estudios económicos, como estudios culturales y filológicos en historia. Fue un historiador Norteamericano pero que se muda a Inglaterra por asuntos políticos, estos era porque consideraban a Finley comunista.

El autor estudia en este capítulo el tema de la ciudad en la edad antigua, partiendo de la convicción de que en esta época las personas vivían en comunidad y no en granjas aisladas “los Propios antiguos tenían la firme convicción de que la vida civilizada sólo podía pensarse en y por las ciudades (p. 35). Si bien el tema de estudio es la ciudad antigua, este no apunta a definirla sino más bien a otorgar ciertos elementos metodológicos y críticos  de como se ha estudiado la Ciudad en el mundo antiguo. Primero que todo parte haciendo la diferencia entre Ciudad y ciudad estado, lo cual para Finley son distintas conceptualizaciones pues la ciudad-estado es concebida por su situación política y la ciudad por su territorio el sector urbano y el sector rural.
Es en este punto donde aparece la idea central que plantea el autor, la cual es como los historiadores, sociólogos y economistas han diferenciado la ciudad antigua de la actual, la cual se basan netamente por asuntos cuantitativos (poca población, menos comercio, etc) o conceptualizaciones modernas  para analizarla, lo cual es la gran critica que hace el autor a la historiografía y también de lo poco que se ha trabajado en el tema por no llamar la atención. Partiendo por Fustel de Coulanges y su análisis comparativo de las ciudades estado, pasando por Werner Sombart y su conceptualización moderna de la ciudad como ente económico, pasando por Marx hasta llegar a Max Weber hace un pequeño análisis linguistico comparando los términos de la antigüedad con los modernos, por ejemplo el termino capitalismo, lo cual considera que es un anacronismo pues los antiguos no tenían esa visión estructurada del mundo, sino como un todo. Al final llega como conclusión que no existio la ciudad antigua en términos económicos, sino más bien existieron muchas ciudades antiguas con distintas características pero con un componente político-social, no económico. Todo esto apoyado en estudios cualitativo de las fuentes, ya que siente que las fuentes no otorgan toda la información y se mantiene escéptico.

jueves, 1 de agosto de 2013

Fustel de COULANGES: “El Cristianismo cambia las formas de gobierno”. La Ciudad Antigua, Editorial Porrúa, México, 1994. pp. 286-291.

Ante todo pido disculpas por no actualizar tan seguido, pero el trabajo no me deja tiempo para leer libros completos y he preferido hacer lecturas cortas pero significativas. He decidido también leer algunos de los autores clásicos para entender la Historia, este mes de Agosto dedicare tiempo a ellos. saludos
imagen del libro  imagen del autor
Fustel de Coulanges desde un punto de vista historiográfico  basado en como la religión estructuro las sociedades antiguas, estudia como el cristianismo  modifico la forma de adorar a los dioses antiguos y por ende la política, la ley y la propiedad en la ciudad antigua romana. El autor explora, en un primer momento, que se entendía por religión en el mundo grecorromano en la antigüedad clásica el cual la devoción había permitido el surgir del derecho y el gobierno. “Religión, derecho, gobierno se habían confundido y no habían sido más que una sola cosa con tres aspectos diferentes” (P. 286). En una primera parte de la investigación se puede observar como la religión controlaba la vida pública y privada, pues se asociaba ese régimen social a la religiosidad. En una segunda parte se puede prestar atención como el cristianismo otorgo una nueva fuerza al sentimiento de la devoción, dándole un aspecto menos material y más espiritual, superando al paganismo y aceptando más adeptos, algo que la religión antigua no aceptaba. “El extranjero ya no profanaba el templo ni mancillaba el sacrificio con su sola presencia” (P. 288). En la tercera parte Fustel realiza un análisis comparado entre este cambio que otorgo el cristianismo a la forma de concebir la religión  desde la perspectiva del gobierno; un gobierno que no es terrenal, donde el gobernante gobierna desde el cielo, que derriba los cultos locales para centrarse en Dios, “La marcha de la política se hizo más libre; ninguna autoridad, de no ser la ley moral, la entorpeció en adelante. Por otra parte, si el Estado fue mas soberano en ciertas cosas, su acción quedo también más limitada” (P. 289)
Fustel de Coulanges nace en Francia en 1830 y muere en 1889, profesor de historia en la universidad de Estraburgo. Su Obra la ciudad antigua plantea las relaciones y comparaciones, que existen en el mundo clásico, sobre las instituciones político religiosas y la propiedad. El tema muy adelantado a su época pues es aborda el problema desde una óptica comparada, escribiendo en modo narrativo y alejado, dentro de la medida, de las corrientes tradicionales del periodo, (recordemos que  la historiografía francesa de Annales aún no surge 1929). Conceptualmente le otorga a la religión no solo un componente político, sino también asociado a una cultura de la época, una forma de vida donde se confunden las estructuras políticas, económicas y sociales. Estas interactúan y se confunden entre sí. También tiene el mérito de plantear que el cristianismo no solo modifico las relaciones de la religiosidad con el mundo público y privado, sino que también supera a su predecesora que es la religión pagana, ambos temas desarrollados en mayor profundidad tiempo después por Paul Veyne*, lo cual convierte a la obra en un manual clásico para abordar los estudios sobre el culto en la historiografía.


* PAUL VEYNE, Quand notre monde est devenu chrétien (312-394), Bibliothèque Albin Michel, Paris, 2007, 320 págs

la imagen extraida corresponde a la pagina de internet
http://bimg2.mlstatic.com/la-ciudad-antigua-coulanges_MLC-F-4402482301_052013.jpg

la imagen del autor se encuentra en la pagina de internet
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhracEOgJtZsvGgOfP5M7QkPVhFufchNQLeMzdqPjahMvCdvYC31HXectRst81PaCc9_Fl6X3xoFFcdZQAWPA-cMymplpjggoF4Jx1tgkudKkpWvTXKtvD-C1dWp8KlcWtiuv35coOYQPQ/s320/Imagen2.jpg

martes, 30 de julio de 2013

David Christian: “¿un mito de creación moderno?”. Mapas del tiempo, Editorial Crítica, Barcelona, 2005. pp. 9-32.

   imagen del libro
   El autor es profesor de la Universidad estatal de San Diego y es estudioso de la historia de Rusia. Actualmente se dedica a estudiar la historia en grandes escalas llamándola “Gran Historia” la cual parte del Big Bang hasta nuestros días donde destaca el papel relativamente minúsculo que  ha desempeñado la raza humana en el desarrollo global de la Tierra. Esta historia se caracteriza por ser de carácter holística y de recurrir fuertemente la interdiciplinariedad, sobre todo de las ciencias duras.

      El capitulo comienza con un prefacio realizado por William Mcneill, este explica que la historia que realiza Christian esta enfocada desde la perspectiva natural donde existen estructuras que se van haciendo mas complejas al igual que la sociedad humana, a diferencia del espacio y la energía el ser humano agrego un nuevo comportamiento que fue el uso del lenguaje lo cual permitió un aprendizaje colectivo de la sociedad. Siguiendo la lógica de la historia ambiental, la Gran historia del autor plantea como las sociedades humanas alteraron y ampliaron los ecosistemas locales logrando con el tiempo que se convirtiera en un patrimonio común a nivel planetario.

     Lo interesante de esta historia planteada por el autor es explicar que si bien las sociedades poseen diversidad y complejidad una de otras, todas tiene una unidad y coherencia común y por ende confirman una escala de tiempo amplia para observar directamente el conjunto desde un punto de vista determinado. Otra característica de este nuevo método histórico es que tiene por objetivo plantear preguntas para el futuro mediante un macrorelato que deconstruya el discurso de algunos conceptos.

imagen extraída de 
http://multimedia.fnac.com/multimedia/ES/images_produits/ES/ZoomPE/4/3/4/9788498921434.jpg

domingo, 28 de julio de 2013

John MCNEILL: “las redes humanas: un historia global del mundo”. El aprendizaje humano, Editorial Crítica, Barcelona, 2004. pp. 7-24.

                Jhonn Mcneill es historiador estadounidense y sus investigaciones se centran en la historia ambiental, tanto a nivel general como en el mundo mediterráneo, la zona tropical del mundo atlántico y las islas del pacifico. La nueva historia Ambiental nace de los profundos cambios ocasionados por el ser humano en el sistema terrestre, el observar la historia como una relación entre el hombre y el medio ambiente es el foco de estudio, en conjunto con los flujos migratorios (al contrario de la historia ambiental tradicional que tenía como objetivos historiar los recursos naturales y los ejes económicos). Además de lo anterior la historia ambiental que trabaja el autor tiene la característica de ser holística, ya que conciben la historia como un estudio interdisciplinario y transdiciplinario, para ello es común que el trabajar estos temas en forma colaboracionista con otros expertos. En el caso de la obra las redes humanas el autor trabaja con el historiador y padre Willian Mcneill.

                El capitulo trabajado y la obra general en si tiene como propósito explicar que el ser humano creo variados significados simbólicos y que estos permitieron una evolución del comportamiento de los individuos. De otro modo se puede sintetizar que el ser humano vive en un sistema natural donde interactúa la organización y la tecnología la cual produce un impacto en el ambiente transformándolo y a la vez permitiendo evolucionar los elementos anteriormente mencionados.

                Antes de comenzar a explicar su tesis, el autor plantea las dificultades que tienen los historiadores a la hora de reconstruir el pasado del hombre prehistórico, los arqueólogos hacen conjeturas con algunos instrumentos hallados, muestras naturales, etc. para comprender porque el simio bajo del árbol y se convirtió en lo que hoy en día es el ser humano. La explicación la atribuye al cambio climático que tuvo el mundo y la fácil adaptabilidad de la especie, lo que mas tarde, según el autor: “se convertían en la especie superior, pronta a instalarse en parajes  alternados al encontrar nuevos tipos de alimento e inventar nuevas formas de obtenerlo” (P. 19)

El capitulo en si trata sobre como el ser humano prehistórico aprendió a organizarse para insertarse en el medio ambiente, para lograr esto el hombre prehistórico recurrió a la tecnología la cual en el capitulo se resume en la capacidad de comunicación y cooperación o dicho de otro modo el lenguaje como tecnología permitió la organización de los seres humanos, los cuales desarrollaron estrategias para poder someter el medio ambiente. Al someterlo, lo modificaron y por ende permitió la coevolución de la sociedad y por ende nuevas formas de organización y tecnología. El lenguaje se expresaba también en ritos, danzas y arte.

                No solo fue el lenguaje como tecnología lo que permitió la coevolución de la sociedad, sino también el uso de las manos, la construcción de utensilios, el uso del fuego, etc. pero fue la interaccion entre estas tecnologías con el medio ambiente y la organización social la que permitio a las primeras sociedades desarrollarse.

Imagen del libro

jueves, 25 de julio de 2013

M. Salinas: "En el cielo estan trillando: Para una Historia de Las Creencias Populares en Chile e Iberoamérica". Universidad de Santiago, 2000. Santiago.

Las ideas fundamentales que se pueden distinguir en los capítulos de la obra que he leido son principalmente dos:
- cristianismo popular: a juicio de Maximiliano Salinas, se entiende por cristianismo popular a los cristianismos folclóricos de las clases oprimidas (campesinos, razas, etc.) que pertenecen al contexto histórico de XVI, tiene como característica principal la creatividad religiosa, el elemento fiestero o carnavales (alegría y buen humor) y sobre todo su cuota de rechazo a la cultura dominante como el clero, la institución católica, protestantismo, los gancheros, los político, la cultura elite, etc. Es este sentido se caracteriza por ser una historia de personas oprimidas.
- mestizaje cultural y religioso: dentro de los aspectos interesantes de este cristianismo popular que explica el autor se expresa la idea de cómo la religiosidad esta en unión con elementos de carácter indígena o mestizo, los cuales están conjugados con la idea como sus hábitos sociales son reprimidos por la cultura imperante, se habla de que no existe un reconocimiento de estas prácticas por parte de elementos tanto políticos (instituciones), morales  (la iglesia y considerar esta relación como paganismo) y la actividad sexual) y sicológicos, de este modo se configura un mestizaje al revés, a juicio del autor), pues se mantiene la idea central de la religiosidad católica pero con fuerte elemento local (por decirlo de algún modo), o en términos simples: “pueblo religioso y anticlerical a la vez” (Gabriela Mistral).
- Medios de salvación popular: debido fundamentalmente a que el cristianismo popular se manifiesta en oposición al cristianismo oficial, posee elementos propios, como por ejemplo cantos, fiestas con carácter alegre y humor, debido a esto el cristianismo popular tiene una fuerte tendencia a la renovación de la vida, lo cual se expresa en las fiestas hacia el niño Dios, María madre, y la poesía popular de Fernandino Guajardo. Siguiendo lo anterior, así como el cristianismo popular tiene un marcado acento a la renovación de la vida, también tiene elementos escatológicos, los cuales expresa el poeta popular que se mencionaba anteriormente, ya que existe la convicción de que como son clases oprimidas llegara el día en que la gente que les hizo daño o se aprovecho de los más débiles (por ejemplo empresarios, clases altas o alto clero) tendrán su castigo divino, así mismo, las fiestas religiosas populares expresan su burla a las clases dominantes y han servido, a juicio del autor, de recipientes para preparar rebeliones. En esta lógica lo central en sí, trata de una comunicación más estrecha entre el sujeto popular y la “religiosidad” (no hablo de relación Dios-hombre, pues el cristianismo popular es mas de carácter mariano o cristológico que con la entidad superior en sí), ya que se trata de hacer mas cercano lo divino y luego volver a elevarlo.

El autor hace un rescate sobre las creencias populares de Chile e Iberoamérica desde una perspectiva eminentemente desde abajo. La hipótesis de la obra en grandes rasgos es afirmar que la cultura popular religiosa es un elemento distinto o incluso entra en conflicto con el cristianismo oficial. El objetivo que se plantea el autor para explicar su hipótesis, en sus trabajos monográficos, es implícito y es explicar que características posee el cristianismo popular como movimiento folclorista (personajes, fiestas, luchas sociales, etc) y como se relaciona con la cultura oficial (sea política o religiosa) y ver sus reinterpretaciones del mundo cristiano como medio para clamar una liberación. Lo interesante de su trabajo en si es como tratar de comprender teológicamente la cultura del pueblo Chileno e iberoamericano no desde una perspectiva claramente marxista de conflicto sociales, política y economía (aunque constantemente hace notar que esta cultura popular es oprimida), sino mas bien desde el punto de vista de la mentalidad y el imaginario.

Maximiliano Salinas, en su obra en el cielo están trillando: para una historia de las creencias populares en Chile e Iberoamérica, hace su estudio en el ámbito de la historia socio-cultural, la razón de este nexo se explica en que su objeto de estudio es la religiosidad popular  como medio para liberarse de las políticas dominantes de la elite tanto política como religiosa, no solo se manifiesta esta teoría de “lo oprimido”, sino también se sumerge en cómo es entendida la espiritualidad por los sujetos populares mediante estudio de casos (el ejemplo del poeta popular Fernandino), lo interesante en este sentido es que utiliza el método historiográfico de la alteridad u otredad. Así como conjuntamente su libro es marcadamente asociado a la historia cultural (utiliza inconsciente transindividual y no el inconsciente colectivo de la historia de las mentalidades) también se distinguen elementos de historia monográfica, pues son distintas investigaciones en diferentes intervalos de tiempo, con distintas temáticas pero asociadas al elemento de la religiosidad.
La forma en cómo escribe el autor es de una manera clara y de carácter cualitativa, es decir va de lo general a lo particular, además va corroborando su tesis y su exposición con la fuente utilizada. Las fuentes que utiliza principalmente son canciones populares, tradiciones orales y festivas (que se han registrado), poesías y en menos medida leyendas y cuentos, todo esto principalmente en el ámbito popular aunque se pueden rescatar algunos poetas nacionales renombrados como Gabriela Mistral e Pablo Neruda, también hay un uso en menor medida de estudios estadísticos o documentos clericales pero que están presentes en la cita que en el texto en sí. Es interesante también amplio repertorio de bibliografía especializada en el Tema sobre todo de historiadores extranjeros donde se destaca principalmente Mircea Eliade e historiadores de cultura popular europea como Mijail Bajtin, también, aunque en menor medida, cita a la Biblia. En el aspecto de las citas Salinas deja sus comentarios al final del texto en conjunto con la Bibliografia, lo cual no hace la discriminación de ambas cosas y dificulta un posible interés de por una obra en particular.  Para finalizar Maximiliano Salinas tiene claro que dentro de su metodología hay algunos aspectos que no se han investigado en profundidad, cita textualmente a Eliade sobre esta dificultad: “lamentablemente, no existe aún una hermenéutica adecuada de las tradiciones rurales o, dicho de otro modo, un análisis de los textos orales mítico-religiosos comparable a la interpretación de las obras escritas” dejando entrever que hasta su investigación tiene límites lo cual eleva su reconocimiento como historiador.

Pd: se acaban las vacaciones y se acaba el tiempo para hacer lecturas completas, pero estaré actualizando mas seguido, aunque con artículos más pequeños.

saludos

*imagen extraída de http://www.albumdesierto.cl/eco/libros/encielo.jpg

martes, 23 de julio de 2013

René SALINAS: “Cuerpo y erotismo en Chile”, en Álvaro GONGORA Y Rafael SAGREDO. Fragmentos para una historia del cuerpo en Chile, Editorial Taurus, Santiago, 2010. pp. 217-256.

imagen del libro
René Salinas Meza es el encargado de realizar el estudio sobre la sexualidad y el cuerpo humano en la compilación de ensayos de Rafael Sagredo y Álvaro Góngora Fragmentos para una historia del cuerpo en Chile. Desde un punto de vista historiográfico y jurídico,  René Salinas explora como se concebía el cuerpo en la sociedad chilena entre los siglos XVII y XIX el cual estaba sujeto a diversas normativas tanto por instituciones sociales como por instituciones espirituales. En una primera parte del ensayo se puede observar como en la Colonia existe un periodo de disciplinamiento del erotismo como una práctica meramente reproductiva y como a partir de la Ilustración y el romanticismo disminuyo este proceso. En una segunda parte se podrá observar como los distintos estamentos de la sociedad colonial responden a este modelo de disciplina o sacan provecho de él.
A su juicio el tema de la sexualidad y el cuerpo en la historiografía no había tenido la importancia que hoy en día se le atribuye. El surgir de los movimientos juveniles de 1960, los llamados hippies, entre otros, exigieron  que este tema saliera de a la palestra y no quedara escondido entre las cuatro paredes de la Iglesia y el Estado, pedían una liberalización del cuerpo. Estos acontecimientos hicieron que la historia cultural empezara a interesarse por estos temas, no obstante, en Chile sólo ahora están sucintado el interés. En parte puede deberse a una moda historiográfica, pero también a la propia realidad chilena que hoy en día acontece.

La hipótesis central de este ensayo es de carácter explicita la cual es “que a pesar de que las autoridades, tanto sociales como religiosas, intentaron controlar por medio de normas específicas el cuerpo y la sexualidad, estas normas fueron desafiadas y transgredidas constantemente” (P. 219). El objetivo general de su investigación también es de carácter explícito en su artículo y trata fundamentalmente de descubrir cómo se concebía el cuerpo y cuál era su reflejo como ente erótico en la sociedad chilena entre los siglo XVII y XIX” (P. 217)

Las ideas principales que se detectan son:
La Colonia: dualidad de juicio y transgresiones: al comienzo del capítulo el autor señala que en la sociedad colonial el matrimonio religioso era un paso fundamental para la vida pero que sin embargo en la práctica se llevaron a cabo muchos ejercicios de carácter pre-matrimonial, lo cual generara el nacimiento de hijos ilegítimos y futuros mestizos, pues las practicas prematrimoniales se aplicaban de los conquistadores a las indias. No existía el matrimonio interracial. De este modo la autoridad empezó a disciplinar a la sociedad señalando que le cuerpo se debe tener solo para funciones reproductivas. Además de esto la sociedad promovió la imagen de un hombre que protegiese a la mujer. “al tener la mujer muy poco poder de decisión sobre su propio destino, se promovió la imagen de un hombre que la protegiese y cuidase de sus actos, justificando así el desarraigo impuesto por la encomienda a las mujeres indias y sus familias” (P. 222). En la mujer española también se dio la pasión erótica y existieron momentos en que arriesgaron  su status social alto al desafiar la normativa reguladora del sexo. “las mujeres españolas, sobre todo las del estrato social alto, debían poner especial atención al cuidado de su honor, dejando de lao los deseos y pasiones, velando por la imagen social del linaje” (P. 225). Por lo anteriormente señalado los españoles les era más común explotar sexualmente a las mujeres indígenas que a las de su condición social pues las indígenas no poseían una honorabilidad. El capitulo finaliza con la cosmovisión de la Ilustración que también regulo la acción sexual dejando a homosexuales y lesbianas como un error de la naturaleza y a la mujer como la portadora de la tentación del sexo.
Los otros cuerpos: monjas, pícaras, pulperas y negras: si bien el matrimonio era una etapa esencial como se señalaba, el autor recalca que algunas mujeres desafiaron esta normativa corporal ya sea consagrándose a Dios y las otra en unión de carácter ilícito. Dentro de los espacios ilícitos cabe destacar el caso de las mujeres negras las cuales por su condición de esclavas no podían casarse y “sus compromisos afectivos y su ejercicio erótico sólo generaron relaciones de amancebamiento surgidas espontáneamente” (P. 235) lo curioso de esta situación es que muchas esposas aceptaron que sus maridos tuvieran estos encuentros con las esclavas para no perder la honra familiar, otras en cambio reaccionaban de manera violenta (golpes) para hacerles sentir su posición social. A pesar de estas condiciones los esclavos negros podían solicitar su libertad si eran víctimas de maltrato por sus amos, esto se debe a que para el esclavo negro en su cuerpo está depositado su honor y no se les podía ofender su reputación. En cambio en las negras no podían postular a esto, pero si a un buen trato el cual era pagado con el acto sexual de la esclava. El capitulo finaliza con el siguiente enunciado que resume lo anterior: “Así queda de manifiesto cómo la imagen del cuerpo y la función que se le asigna es, finalmente, una construcción cultural, y por lo tanto experimenta variaciones según el contexto en que surge” (P. 240).
Erotismo y sexualidad en la Colonia: en este apartado se habla sobre como el uso sensorial del cuerpo expresaba placer erótico. Este se expresaba en cada una de sus partes. Muchos eclesiásticos pedían en la confesiones de sus penitentes explicitaran sus conductas eróticas para así llevar a cabo un rol mucho mas fiscalizador del comportamiento, sin embargo, muchos sacerdotes llegaban a practicar el autoerotismo y con ello denuncias a estos frailes, pues muchos de ellos pervertían a sus compañeros.
La prostitución tolerada: durante el periodo colonial, según las investigaciones realizadas por los historiadores estuvo en cierta medida tolerada y con cierta autonomía: “Es paradójico que los monarcas concediesen desde un principio licencias para que se instalasen casas de prostitución en las colonias con el objeto de evitar que los conquistadores (muchos de ellos son una adecuada instrucción moral) indujesen a las nativas al comercio sexual, ya que el objetivo teológico de la conquista era evangelizar y no prostituir a los indígenas” (P. 244). En cierto modo, a juicio del autor, la prostitución era un mal necesario.
Las transgresiones en torno al cuerpo: en este capítulo el autor habla de las grandes conductas sexuales corporales que eran consideradas transgresoras: el adulterio, el estupro y la sodomía. Lo interesante de este capítulo es la definición que le otorga el autor a estas prácticas desobedientes. Así vemos que el tema del adulterio es considerado como “la seducción de un cuerpo ajeno”, el estupro como “la violación, mediante engaño, de mujeres vírgenes, viudas de buena fama o religiosas” (p. 248) y la sodomía como la atracción y practica erótica entre personas de un mismo sexo.
Nuevas expresiones del erotismo: en el último apartado de este ensayo se habla como la representación del sexo y el placer erótico van modificándose producto de las corrientes liberales de Europa. “la liberalización del erotismo se acentuó con la influencia de la revolución de 1848. Las décadas siguientes conocerán un creciente aburguesamiento de la vida social, atenuándose en algunos grupos la religiosidad y otorgándosele una mayor formalidad el trato entre las personas. Las mujeres comenzaron a liberarse de la tutela paterna en la elección de la pareja” (P. 250). De este modo empieza a surgir elementos del romanticismo como el escribir cartas al ser amado guardar representaciones del amado como objetos de él o mechones de pelo. No obstante, a pesar de estas prácticas no se pudo terminar con la reglamentación implícita del erotismo, la Iglesia y la intelectualidad chilena del siglo XIX postulaban un control disciplinario basado en el concepto de lo “normal” y lo “anormal” en el plano erótico-sexual, de esta manera las practicas como la prostitución y el libertinaje sexual fueron visto dentro del marco de lo anormal. “se prohibió el ejercicio públicamente libre del erotismo en nombre de la tranquilidad pública” (P. 255)

El trabajo realizado por René Salinas Meza está escrito a modo de ensayo y del que se puede distinguir claramente un orden de lo general a lo particular en su investigación, partiendo de la justificación de porque escoge el tema de estudio, sus procedimientos metodológicos (planteamiento del problema, hipótesis, objetivos) el desarrollo del tema en sí y las conclusiones al respecto. Curiosamente para ser un trabajo de tipo ensayístico y exploratorio el autor hace uso bastante de citas a pie de página sobre las fuentes que utiliza esto demuestra que el autor no posee aun la autoritas como para realizar un trabajo de esta índole
Las fuentes que utiliza para poder realizar su estudio son documentos jurídicos de la época del Archivo nacional de Madrid (fondo inquisición de Lima), archivos de la Real Audiencia, fondo judicial de San Felipe, fondo Capitanía General, Archivos arzobispado de Santiago (fondo, pleitos matrimoniales), etc. Donde se pueden rescatar diversos testimonios sobre las transgresiones al cuerpo en el periodo investigado. El autor también utiliza bibliografía especializada para apoyar sus postulados o recoger otros testimonios que no pudo obtener directamente, así como también recoger documentación a través de internet. Entre la bibliografía citada se puede encontrar a: Georges Vigarello compilador de la obra historia del cuerpo: del Renacimiento a la Ilustración, Margarita Iglesias, Maria Emma Mannarelli, Mauricio Rojas, Maria Eugenia Albornoz (historiadores del delito), Claudia Rosas, Raquel Rebolledo, Elizabeth Mejias, Ximena Azua (historiadoras de género), entre otros, lo cual demuestra que a pesar de ser un ensayo trata en lo posible de corroborar sus postulados con estudios ya antes realizados y sobre todo, de un marco teórico fuerte a la hora de profundizar este estudio.
El tipo de historia que realiza René Salinas es una historia social con algunos matices en historia de género pues principalmente su estudio está basado a las normativas que se le dan a los sujetos populares que a la elite en sí (el autor trabaja con las mujeres españolas pero no profundiza), además de ver más el aspecto del cuerpo en mujeres en relación a los hombres. Su método de trabajo es de carácter exploratorio, claramente explicitado en su objetivo además de que no hay un análisis profundo de las temáticas que aborda. Metodológicamente hablando el autor observa a través de las fuentes oficiales como se comportaban los sujetos históricos describiendo los abusos y beneficios que tenían con el uso de sus cuerpos. Además de lo anterior se puede destacar que el trabajo realizado no está escrito a modo cronológico sino sujeto a grandes subtemas como mujeres transgredidas, visión a el erotismo en la sociedad, normas para regular la sexualidad y el cuerpo, etc.
Sin duda lo más novedoso del tema en su investigación es la utilización de la fuente, el autor hace variados estudios de caso para corroborar los postulados, el testimonio de mujeres populares transgredidas muestran claramente los delitos sexuales que se cometían en el periodo colonial, también se puede destacar el amplio espectro que intenta abarcar el autor con el tema del cuerpo y el erotismo el cual va desde todos los estratos sociales y todas las “desviaciones” que la autoridad y la Iglesia procuraron “normalizar”. En cierto modo el tema del erotismo es difícil abarcar debido a la complejidad del tema y las fuentes a utilizar.
A juicio personal creo que lo añejo de este tema de estudio es que la mayor parte de sus trabajo está asociado a trabajos de archivos, el trabajo interdisciplinario con la sociología y la antropología es muy somero, además  no hay un rescate de otro tipo de fuentes y de las que hay no se realiza una interpretación más profunda de tema en cuestión, la imagen que se introduce en el texto con el propósito de facilitar su comprensión solo queda como un anexo y no hay un verdadero trabajo de análisis. un punto importante que creo que merecía atención es el tema de la transgresión en sí, pues el autor recalca constantemente las medidas represivas que el Estado y la Iglesia cometía hacia los individuos, no obstante, tenemos que tener presente que se está hablando de un Estado en formación que no tenía todos los medios coercitivos para mantener ese orden, asumo que mucho del tema de la represión sexual no parte solo de estas instituciones, sino también de las mismas personas en sí, sería muy trascendente ver este punto para entender porque hasta el día de hoy aun se puede visualizar esta ética sexual o el Biopoder*. Otro asunto que deja un tratamiento sutil al tema de las transgresiones es el tema de la definición de los conceptos. Por ejemplo el concepto de la sodomía que utiliza el autor es una noción demasiado acotada y para siglo en estudiado se entendía por este término como las relaciones extra-vaginales heterosexuales, bestialismo y relaciones homosexuales (entre hombres y mujeres), sin duda alguna estos pequeños pero significativos son necesarios**.
Otro aspecto que considero importante mencionar es lo poco elaborado de la discusión bibliográfica, faltan los aportes de Foucault, Marcuse, por decir los más renombrados en el plano del erotismo o algunos Teóricos que den algunos aportes al tema. Todo esto deja entrever que el tema no está profundamente trabajado pero a la vez no es un tema terminado.
La importancia historiográfica que posee su investigación es mostrar un tema poco abarcado por los historiadores en Chile. La temática del sexo aun en nuestro país es un tema tabú: la problemática de la píldora del día después, embarazos no deseados, casamiento de gays, entre otros son temas que afectan a nuestra contemporaneidad y es necesario remontarse a la historia para comprender estos fenómenos sociales. René Salinas hace este rescate jurídico para comprender el porqué nuestra sociedad fue conservadora sexualmente y hoy ha empezado a “liberarse” o porque a pesar de que en 1925 se hizo la separación Iglesia-Estado aun se puede observar que actúan juntas en temas de carácter ético.

*Véase en Foucault, M: Historia de la sexualidad I: la voluntad de saber, Siglo XXI, Buenos Aires. 2005.
**Courtine, J y Vigarello, G: Historia del Cuerpo: del renacimiento a la Ilustración. Volumen I, Taurus, 2005. P. 215.

pd: pido disculpas, el blog no me dejo subir imagenes.